A raíz de la Reforma Laboral que se aprobó el pasado viernes opino que ahora es el momento de abordar la reforma de la remuneración de la innovación.
Por tanto, la respuesta es: “SI, es urgente una reforma de la remuneración de la innovación”.
La innovación como estrategia para el desarrollo y el crecimiento de las empresas y de la economía del país hasta ahora ha recibido un apoyo que, en mi opinión, ha sido insuficiente. No han existido unas políticas claras y representativas de apoyo a la innovación de las empresas; se ha considerado más importante la I+D que la innovación, cuando lo que realmente crea empleo es la innovación, la I+D es importante pero no es la via para la creación de empleo que se necesita para reducir la actual tasa de desempleo.
Por otro lado, si se quiere que se produzca un cambio en el modelo productivo en el que la Innovación aporte el valor añadido que permita la recuperación de la economía y del empleo, será necesario que cambie la visión respecto a la contribución de los empleados a la innovación.
Hasta ahora en la mayoría de las empresas no se reconoce una retribución complementaria para aquellos empleados que contribuyen, de forma diferenciada, con su ingenio y sus conocimientos al crecimiento de la empresa mediante la innovación de productos, servicios, procesos, modelos de negocio, …
En el recientemente firmado II Acuerdo social para el Empleo y la Negociación Colectiva 2012-2014 se incorpora el siguiente texto “los convenios colectivos deberán incluir componentes adicionales de actualización de salarios basadas en la evolución de indicadores económicos (salario variable) asociados a la marcha de la empresa (beneficios, ventas, productividad, etc.).»
Como podemos leer no se habla claramente de Innovación ya que se habla evolución de indicadores económicos. Pero la pregunta a plantearse es: ¿Cómo se aumentan los beneficios, las ventas o la productividad con respecto a la situación actual?
Existen diferentes respuestas, pero la que claramente tiene más incidencia para crear un cambio importante es la Innovación. Si las empresas son capaces de generar innovaciones en productos, procesos y servicios que les produzcan un incremento de los pedidos y de la facturación que hagan necesaria la incorporación de más empleados para poder cubrir la demanda que realizaran sus clientes, entonces, se creará empleo.
Pero para ello hay que cambiar el paradigma, la Innovación es algo especial, y requiere una retribución especial, una retribución complementaria vinculada al éxito de esta Innovación.
Pero el cambio de paradigma requiere una visión global del concepto de retribución, que incluya elementos tangibles e intangibles.
Para acabar querría recordar que: “Si innovamos, ganamos todos”.
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